Lindsay Lohan
Toti Chumpete se nos enamoró de la Lindsay Lohan, ¿vio? Y nosotros quisimos hacerle un regalito de Navidad y lo mandamos a entrevistarla. Pero todo terminó mal. Muy mal.
Sí, sí, queridos lectores de esta alocada sección, quisimos darle un alegrón a nuestro estimado colega y colaborador después de tantas jornadas de amarguras.
Comprendan: Toti Chumpete es como un soldado. Siempre hizo todo lo posible, y aun lo imposible, para conseguir entrevistas que finalmente se vieron frustradas. Vaya como ejemplo la vez que lo vestimos a la Che Guevara y lo mandamos a entrevistar a Fidel Castro. El tipo se puso la boina y fue sin chistar. Y ese sacrificio, señores… Ese sacrificio (y se nos pone la piel de gallina mientras lo decimos) no será reconocido nunca por la sociedad, ni por el Estado, ni por Raúl Castells, ni… ni siquiera por nosotros.
Pero eso fue verdad hasta la semana pasada, cuando enviamos a Toti hacia Los Ángeles para entrevistar a la actriz Linday Lohan, habitual personaje de nuestra página web.
Sin lugar a dudas, podemos decir que Chumpete está re caliente con esta chica. Él dice “enamorado”, pero… Como señaló Niesztche: “la verdad está de la cintura para abajo”. Sea lo que fuere, quisimos cumplirle el sueño del pibe y le propusimos entrevistar a Lindsay.
A la media hora, Toti ya se había comprado un traje de primerísima línea, unos calzones Calvin Klein, un perfume de la misma marca... y hasta se había bañado. Cosa inaudita.
Por supuesto que no teníamos ni tenemos ningún contacto con la señorita Lohan, pero a nuestro calentón compañero poco le importó. Él mismo se sacó el pasaje y viajó hacia las tierras de Jorgito Bush.
En un hecho sin precedentes, Toti Chumpete decidió relatar él mismo lo que pasó en su valiente intento por entrevistar a una estrella de Hollywood.
Acá les va, de puño y letra de nuestro enviado (no) especial:
“No, no, no, no, no, no, no, no… Ustedes no saben… No saben lo que fue eso. Fue algo espectacular. Cuando llegué, me bajé del avión y… Uuuuuh, de sólo acordarme me pongo como loco. Es algo casi indescriptible lo que me pasó, algo que sobrepasa los límites incluso de mi afilada pluma. Y eso que yo empecé a trabajar ya de muy pequeño, para que sepan. Verán: mi padre era carpintero, mi madre era ama de casa y vivíamos muy felices en nuestra casa en las afueras de la Capital Federal. Todo esto hasta que una mañana me enteré de la tremenda noticia: iba a tener un hermanito. No, ustedes no saben lo tremendo que fue eso. No me olvido más, posta. Años más tarde con mi analista pudimos sacar a la luz este rincón oscuro, este resentimiento que había quedado en mi alma. Los celos… Uuuuh, los celos que me habían agarrado. Ya cuando mi hermano creció nos empezamos a llevar mejor… Bah, lo que se dice “mejor-mejor” no, pero hubo un avance en mi relación con él. Además, todos sabemos cómo son las relaciones familiares, ¿no? Como dije, mi padre era carpintero y yo le salí periodista. Mi viejo pensó que era gay cuando le comenté que ésa era mi vocación, así de duro era. Es un claro Complejo de Edipo que nunca pude resolver. Y mi madre… Bueno, ya la historia de mi madre es otra cosa: ella es hija de inmigrantes sicilianos. Su bisabuelo, incluso, había sido integrante de la mafia. Y después la guerra en Europa, y toda el viaje en barco, que bueno… Ahora se viaja mucho mejor que antes. Eso seguro. (No pude hacerle la entrevista a Lindsay Lohan). Y mi madre, bueno… Ahora, si hablamos de mi madre tenemos que hablar de una amiga suya, de la cual yo me enamoré platónicamente. (A Lindsay no la encontré por ningún lado, pero disimulen). Era una mujer muy adorable y fue como una segunda madre para mí. Pero, claro: cuando crecí me di cuenta de que la quería de otra manera. Ustedes entienden. (Soy un desastre, tengo miedo de que me echen a patadas). Después murió esa amiga de mi mamá y me quedó flor de trauma. Imagínense. En fin…”
Momento, momento… Recién ahora estamos leyendo la nota de Chumpete completa y… ¡es un chamuyero! ¡Ni siquiera cuenta su fracaso! ¿O habrá hecho la nota y se la estará vendiendo a Infobofe?
Pero… ¿en serio te enamoraste de la amiga de tu mamá? Fuerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario